Mejor es holgar

Una joven con los pies separados se halla frente a un viejo desdentado de prominente barbilla que está sentado sobre un gran saco. La joven sostiene un ovillo de lana entre sus manos que apoya en su regazo en un gesto que tiene claras connotaciones eróticas. Entre ambos, en segundo término, se advierte la presencia de una vieja sentada que sujeta una madeja de hilo y que podría estar sugiriendo de esta manera la relación entre el hombre y la joven.

El manuscrito de Ayala explica este grabado de la siguiente manera: "Más quieren las mujeres echarse a la bribia, que desenmarañar madejas y trabajar en casa", mientras que el del Museo Nacional del Prado apunta: "Si el q.e trabaja es el q.e menos goza, tiene razon mejor es olgar". La explicación más detallada es la de la Biblioteca Nacional; en la estampa se interpreta con estas palabras: "Una familia viciosa difícilmente se sujeta a las ocupaciones honestas caseras. El bestia del marido se pone a tener la madeja, se enreda; la suegra la desenmaraña y la mujer se cansa y manifiesta en sus ademanes que la tiene más cuenta echarse a la bribia".

El contenido de este grabado está bastante claro: se trata de una crítica de la prostitución a la que muchas mujeres recurrían para solucionarse la vida. La vieja que está en el centro de la composición teje un vínculo entre ambos, es quien ha tramado el origen de esta relación. La joven aceptará unirse al hombre a pesar de su aspecto desagradable por motivos puramente económicos.