De todo sirven (G.28)

Véase Se hace militar (G.1).

Forma parte de la serie de dibujos, incluidos en los cuadernos de Burdeos, en los cuales Goya reproduce curiosos medios de desplazamiento, dentro de su interés por retratar instantes y personajes de la vida urbana de Burdeos y París. Cuatro de estos dibujos tienen como protagonistas a las sillas de espaldas (G.24, G.26-G.28) y, en el caso de éste, Goya ha representado el momento justo antes de que se inicie uno de estos transportes, así como las actitudes de los distintos personajes protagonistas. En primer plano, hay dos de estas sillas de espaldas, todavía en el suelo. Entre ellas, un conductor ya se ha acomodado a la espalda el vehículo y se dispone a levantarlo. Junto a él, pero en un segundo plano algo difuso y con mayor trabajo de las sombras, otras dos mujeres esperan su turno para montarse en la silla de la derecha, que permanece vacía. En el interior de la silla de la izquierda, adivinamos la presencia de otra dama, gracias a los efectos de transparencia de la cortina que la cubren. El interés de Goya por este tipo de escenas ha sido interpretado desde diferentes perspectivas (crítica social, relaciones de poder entre géneros) pero destaca, ante todo, su capacidad de trascender lo anecdótico y dotar de vivacidad a lo que podría ser una simple escena de género.