Aparición de la Virgen a San Julián (dibujo preparatorio)

Véase Aparición de la Virgen a San Julián.

Este dibujo preparatorio tiene una composición muy similar a la del lienzo definitivo que pintó Goya para el lateral derecho del altar mayor de la Iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora de Valdemoro, altar mayor que, encargado por el ministro Pedro López de Lerena, se concluyó en 1790 y en el que colaboró con sus cuñados Francisco Bayeu, que se encargó de la pintura central, y Ramón Bayeu, que se ocupó del lienzo lateral izquierdo. No obstante, a pesar de las similitudes con la obra definitiva, algunos autores como Camón Aznar dudaron en el pasado de la autoría del dibujo por parte de Goya, algo hoy ya superado, pues la pieza mantiene la técnica empleada en varias ocasiones por el pintor para otros estudios preparatorios y además la trayectoria del dibujo tras su creación resulta clara e indiscutible, pues fue propiedad de los descendientes del artista. De hecho, tanto Manuela Mena como el propio Museo del Prado lo consideran obra autógrafa indiscutible de Goya (volumen II del Catálogo razonado de los dibujos de Goya).

El dibujo está realizado a clarión o tiza en su totalidad, un caso no demasiado frecuente, aunque no único, en la trayectoria de Goya, a pesar de ser la técnica académica recomendada para dibujos preparatorios. De hecho, hizo lo propio, usando además el mismo tipo de papel verjurado gris azulado, en otras obras cercanas en el tiempo como Rendición de Sevilla (bosquejo), bosquejo de un lienzo probablemente no realizado, Aparición de la Virgen del Pilar a Santiago y los convertidos, dibujo preparatorio del lienzo del desaparecido retablo colateral del lado del evangelio de la Iglesia parroquial de Urrea de Gaén, y San Francisco de Borja despidiéndose de su familia, dibujo preparatorio del cuadro de altar del lado del evangelio de la capilla de San Francisco de Borja de la Catedral de Valencia.